Exfoliante casero para el cuerpo: 4 formas de hacerlo
La exfoliación es un gesto imprescindible dentro de la rutina de cuidado de la piel. Aquí te hablamos del exfoliante casero para el cuerpo y te mostramos 4 formas de hacerlo fácilmente en tu casa.
Una correcta higiene de la piel comienza con la exfoliación. Muchas veces pensamos que con ducharse a diario e hidratarse es suficiente para que la epidermis esté sana, pero no es así.
La piel del rostro y del cuerpo acumula células muertas y toxinas y para eliminarlas, es importante que la exfolies 1 o 2 veces por semana, dependiendo de sus características o de la época del año.
Si aún no te exfolias, pero quieres comenzar desde ya, aquí te mostramos 4 recetas para que tú misma puedas elaborar un exfoliante casero para el cuerpo y comenzar a disfrutar todos los beneficios que aporta a la dermis.
Exfoliante corporal: ¿Cuáles son sus beneficios?
El exfoliante es uno de los cosméticos básicos que toda buena rutina de belleza debe incluir. ¿Por qué? Pues, muy sencillo.
Este producto elimina las células muertas y limpia los poros en profundidad para que los principios activos de las cremas penetren mejor a través de la epidermis.
También estimula la regeneración celular, oxigena los tejidos, tonifica y evita que el vello se enquiste por la depilación. En definitiva, es el mejor aliado para el cuidado de la piel y su salud, sin duda, pasa por este paso.
Tipos de exfoliante
No todos los exfoliantes corporales están elaborados con los mismos ingredientes.
Elegir la mejor alternativa dependerá en gran parte de tu tipo de piel. Estos son los 2 tipos más utilizados.
Sal
El origen del exfoliante de sal se remonta a los tiempos del antiguo Egipto. Se elabora con sal marina y aceites esenciales y, aparte de eliminar las células muertas, tonifica y ayuda a mejorar la circulación sanguínea.
¿El inconveniente? No está hecho para todo tipo de pieles. Se recomienda especialmente si la tienes muy seca o para usarlo en algunas zonas más ásperas como talones o codos.
Si tienes la piel sensible, es mejor que lo evites porque puede irritar y empeorar el problema sobre todo si lo aplicas enérgicamente.
Azúcar
Es uno de los más usados y menos ‘agresivos’. Es más suave y, por lo general, contiene gránulos más pequeños que el de sal, de ahí que sea perfecto a la hora de exfoliar la piel sensible.
Se suele mezclar con aceites esenciales y con otros ingredientes naturales como el limón.
Elimina las células muertas, desobstruye los poros y ayuda a revitalizar y a proteger la superficie cutánea frente a las agresiones externas.
Estos son los ingredientes más habituales, pero también se pueden elaborar con granos de café, avena, leche o algunas frutas como las fresas, las uvas o las fresas.
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¿Cuáles son las ventajas de elaborar un exfoliante casero para el cuerpo?
Elaborar tus propios cosméticos tiene muchas ventajas, pero una de las mayores es, sin duda, poder elegir tú misma los ingredientes.
De esta forma, puedes escoger los activos que le van mejor a tu epidermis y asegurarte de que son 100% naturales.
Otra de las ventajas es el ahorro. Todos tenemos en casa sal, azúcar y algún que otro ingrediente con los que elaborar un exfoliante en tiempo récord y, por eso, resulta mucho más económico que comprar uno.
Además, no tendrás que preocuparte de si se acaba el producto.
Podrás elaborarlo cuando quieras rápidamente y de forma sencilla. Al fin y al cabo, es posible que tengas casi todos los ingredientes en casa.
Exfoliante casero para el cuerpo: 4 formas de hacerlo
Ahora que ya conoces los beneficios de este cosmético, con qué puede elaborarse y las ventajas de prepararlo en casa, aquí te mostramos 4 recetas muy sencillas para preparar el tuyo.
Exfoliante con azúcar, tomate y limón
Ingredientes:
- 2 o 3 cucharadas de azúcar
- ¼ de tomate
- Una gotas de limón
Elaboración:
Primero, parte el tomate en dados pequeños y añade 2 o 3 cucharadas de azúcar blanca. Si lo prefieres, también puedes usar azúcar moreno, aunque ten en cuenta que el grano es un poco más grande.
Para finalizar, añade unas gotas de limón. Aplícalo sobre la piel humedecida y aclara con abundante agua tibia.
Exfoliante con sal, aceite de oliva y miel
Ingredientes:
- Sal marina fina y gruesa
- Miel
- Aceite de oliva
Elaboración:
En un recipiente muele una taza de sal marina gruesa y mezcla con media taza de fina. A continuación, agrega un chorro de aceite de oliva y una cucharada de miel.
Remueve para que se integren bien los ingredientes y obtengas una textura homogénea y espesa.
Además de eliminar las células muertas, tiene propiedades antibacterianas y contiene vitaminas que te ayudarán a mejorar el estado y la salud de tu piel.
Exfoliante con azúcar, vainilla y coco
Ingredientes:
- ½ taza de azúcar
- Vainilla
- 1 cucharadita de aceite de coco
Elaboración:
Mezcla en un bol el azúcar, la vainilla y el aceite de coco. Puedes usar aroma de vainilla o echar las vainas troceadas directamente, dependiendo de la textura que quieras conseguir.
Mezcla bien hasta conseguir una pasta homogénea y extiende por todo el cuerpo. Por último, aclara bien.
Esta receta está recomendada para pieles secas. El aceite de coco es muy hidratante y ayuda a restaurar la barrera lipídica que protege la epidermis.
Exfoliante con sal y lavanda
Ingredientes:
- 3 cucharadas de sal fina
- 250 gr de lavanda
- ½ limón
- 2 cucharadas de aceite de oliva
Elaboración:
Primero, echa en un recipiente las 3 cucharadas de sal fina. No uses sal marina, es mejor que uses sal epsom, muy rica en magnesio y sulfato, que también se utiliza para elaborar las sales de baño.
Después, añade la lavanda, el zumo de medio limón y el aceite de oliva. Mezcla bien y cuando obtengas una pasta, aplícalo sobre el cuerpo. Por último, aclara con abundante agua tibia.
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Y hasta aquí nuestro post con 4 recetas muy fáciles para elaborar un exfoliante casero para el cuerpo. Esperamos que te haya resultado útil.